martes, 2 de diciembre de 2014

Verbos impersonales.



Según la Real Academia Española, un verbo es una clase de palabras que puede tener variación de persona, número, tiempo, modo y aspecto. La palabra “impersonal” se dice de la oración que carece de sujeto o en la que este se omite por desconocido o irrelevante. Los verbos impersonales son aquellos que solo se conjugan en la tercera persona del singular y vienen de la lengua latina, y también se pueden encontrar en otras lenguas como el francés o el alemán. 
No deben confundirse con las oraciones que simplemente no tiene sujeto léxico. Por ejemplo, en el enunciado “Estudiamos los verbos impersonales”, el verbo “estudiamos” no tiene sujeto léxico -no dice “nosotros estudiamos”-, pero sí lo podría tener. Si no lo tiene es porque el emisor decidió no incluirlo, al constatar que el sujeto gramatical -en este caso 1ª persona del plural- ya es suficiente para que el receptor sepa que la acción la realizamos nosotros.
Los verbos impersonales son aquellos que no aceptan ningún sujeto léxico, es decir, no lo tienen porque no lo pueden tener, no porque el emisor haya elegido no incluirlo.

Tipos de verbos impersonales:
·         Verbos impersonales propios son verbos que, en su sentido original, se conjugan sólo en la 3ª persona. Dicha categoría está compuesta por los llamados "verbos meteorológicos" o "climáticos" (lluevenieva, etc.). Estos verbos son intransitivos.

·         Verbos impersonales impropios, por el contrario, son verbos que si bien en algunos contextos poseen una conjugación normal, pueden ser usados como impersonales (de ahí su categoría de impropios). Por ejemplo: el verbo "hacer" puede ser usado en contextos como: "Hace calor"; "hace años", en singular.
Los verbos impersonales impropios del español son:
·         Haber: "Hay cosas que hacer". "Hay héroes para todos los gustos" 2
·         Hacer: "Hace muchísimo calor".
·         Bastar (en su forma "bastar + preposición"): "Basta de palabrería".
 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario